Hace algunas semanas os
informábamos de que nuestros compañeros de primero estaban a punto de empezar
su mes de Ejercicios Espirituales en Javier. A estas alturas, nos consta que
están bien y profundizando en el encuentro con el Señor. Nosotros, junto con
tantos otros, seguimos rezando por ellos.
El Noviciado, sin embargo, nota
especialmente su ausencia. La casa se vuelve algo más silenciosa ahora que
somos menos. El horario es prácticamente idéntico al que describíamos en anteriores
entradas. Ahora bien, durante el mes de enero que estamos concluyendo, han
tenido lugar varios acontecimientos reseñables.
Del día 10 al 15, los novicios
tuvimos ocasión de visitar a nuestras familias. Las visitas a las familias
tienen lugar en verano (tanto en primero como en segundo) y a la vuelta de
Navidad (en segundo). Además, en noviembre y mayo, son las familias las que nos
visitan a nosotros y pasan algunos días en San Sebastián. Es una gran alegría
poder pasar esos días en casa de nuestros padres y visitar a algunos amigos.
Ya de vuelta al Noviciado,
retomamos los cursos. Este trimestre nos centraremos, entre otros, en el
estudio del voto de obediencia. Por si fuera poco, a lo largo de la semana
pasada, tuvimos dos cursos intensivos. Por un lado, Patxi Álvarez de los Mozos
nos introdujo en la Misión de la Compañía hoy, a través de la lectura de varios
Decretos de las últimas Congregaciones Generales (32, 34 y 35). Por otro,
Alfredo Verdoy nos ayudó a penetrar en la intimidad de San Francisco Javier,
para lo cual leímos parte de sus cartas. Muchas gracias a los dos por lo
transmitido y por irnos enseñando en qué consiste ser jesuita.
Parte de los novicios de segundo con Patxi |
No hay comentarios:
Publicar un comentario